Todavía no os había presentado a nuestra conejita.
Se llama Carlota, es una coneja de raza toy polonés que está con nosotros desde Noche Buena y nos tiene enamorados a todos.
Vive en una jaula en la que tiene una bandeja para hacer las necesidades, pero la mayoría del tiempo (sobre todo a la hora de las comidas) está suelta. Es como si tuviésemos en casa un gatito.
Como le gustan mucho los rincones y sitios estrechos, la peque le ha hecho una casita con una caja de cartón que ha decorado incluso por dentro. ¡Está hecha toda una crafter!
La conejita Carlota está encantada y pasa mucho tiempo dentro de su cabaña. ¡Tendríais que verla cuando se acuesta sobre la cama de muñecas!
En casa de mis padres siempre hemos tenido mascotas, pero en nuestra casa no, porque mi marido no es muy animalero, pero la peque al escribir la carta a los reyes les pidió un hermanito, alegando que no tiene con quien jugar en casa (aparte de los papis) y si el hermanito no podía ser, pues una mascota.
Como os podéis imaginar, Papá Noel le trajo la conejita y como he dicho antes, nos tiene enamorados a todos (papá incluido).
Desde que la conejita Carlota está en casa, la peque apenas pide para ver la tele. Se pasa horas y horas jugando con ella, cantándole canciones, etc.
Las mascotas le hacen tanto bien a los niños… ¿verdad?
Un saludo,
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